jueves, enero 05, 2012


Bitácora Hyperboreana presenta:
FlameGyver

"Vaselint" Ombligo Firestarter

¿Qué hay mis cuatro? espero que se encuentren bien. 

Estarán de acuerdo conmigo que esto de la supervivencia es un constante quehacer, es tener siempre nuestro acerbo de conocimientos actualizado (o tratar, al menos, de no perder el paso) y si bien es importante nunca dejar de estudiar las mil y un disciplinas para "más o menos" salir bien librado de alguna situación de emergencia, siempre cuentan como igual, y aún más si acaso, las chapucillas que hayamos recogido por aquí y allá, esos suculentos as-bajo-la-manga que hacen las delicias cuando las mejores cartas del mazo no están a nuestro favor.  

Precisamente aquí les presento un recurso para encender fuego de la ya tan afamada y multipremiada   (ja!) sección FlameGyver, mis niños, les advierto que nunca van a ser suficientes los métodos que tengan que aprender para "hacer lumbre", así como que nunca habrá rincón en nuestro equipo en el que no carguen siquiera un cerillo tuneado para que encienda donde sea o algún trebejo que suelte chispa al rasparlo. De la misma manera nunca serán suficientes los sitios que postean este tipo de técnicas aunque las veamos repetidas ad-nauseam  seguramente bajo la forma de sitios, foros, blogs  y/o videos, en fin, aquí va a un aporte más de este su servidor.

Bien, rueda la pregunta:  ¿Qué hacer cuando todos los métodos para hacer fuego te fallan? pensemos que -hipotéticamente-  hay temperaturas que rozan el nivel de congelación y como la luz del día se extingue la poca materia flamable para comenzar tu fogata, dígase yesca, escasea o está húmeda e inservible ¿a quién recurrir? ¿resignarse y pasar una noche estilo perro callejero? ¡No mis amigos! Por fin he descubierto un método que revolucionará la manera de encender una fogata, la única y fina yesca reciclable 100% algodón, libre de tóxicos y disponible en cualquier momento,  se trata de...

¡LAS LANAS DEL OMBLIGO!




¡No caballero, señorita, esto no es una tomadura de pelo, el susodicho que escribe (sic) este Blog no se ha vuelto loco! las lanas de ombligo, o como se le llama en la lengua de Chécspir "Belly Button Lint" o en algunos casos simplemente "Lint" pa los compas, es, de hecho, un recurso harto útil pero demasiado subvalorado por la comunidad campista ¿qué más podemos pedirle a esa parte de nuestra anatomía  aparentemente inútil y hasta en algunos casos antiestética?. Eso si, dependiendo de qué tamaño tengamos la tripocha,   nuestro ombligo albergará más o menos cantidad de este innovador  recurso yesqueril, y va desde el modelo "lavadero"  (la menos conveniente, pero útil con las chicas) hasta la apariencia de barril cervecero que será todo un verdadero  "habitáculo de lanas".

Pero bueno, poder encender una fogata en situaciones adversas con poco menos de medio céntimo de gramo de lanitas ombligueras (sin contar los pelillos) suena un poco descabellado y hasta absurdo, por ello, el hombre blanco, con su gran sed de aplicaciones científicas comerciales (tecnología) que nos solucione absolutamente cualquier ámbito de nuestra vida diaria, ha inventado un fabuloso extractor de  lanas ombligueras para que no batallemos más y tengamos acceso a este fabuloso recurso FlameGyveresco.  Hélo aquí:


Este moderno dispositivo, en adelante referido vulgaris conocetia como "secadora", tiene la ventaja de captar mediante un sofisticado sistema de filtración esas lanillas que se van a alojar de la ropa hasta nuestro ombliguete, eso si, habrá que recuperar esta materia prima ya que la máquina puede sufrir severos daños. En la imagen se aprecia un filtro atiborrado de Lint a punto de ser cosechado, un gran botín por cierto.




Pero bueno, si queremos que esto trabaje apropiadamente necesitamos "transformar" este recurso en función de obtener un mejor desempeño. Por lo tanto, para este ejercicio necesitaremos un trozo de papel aluminio, un tarro de vaselina, una bolsa de cierre de zipper y por supuesto, la cantidad de lanas que hayamos reunido.


Como fue un verdadero desmadre el querer captar gráficamente el momento de elaboración de los cartuchos de Vaselint sólo me limitaré a relatar que es una tarea un pco triquiñuelosa, para empezar necesitamos tomar un pedazo de lint de aproximadamente una pulgada de diámetro y anidarlo en la palma de la mano la cual deberá estar embadurnada de vaselina. acto seguido deberemos amasar a modo de "embarre" no de ablande, y así conseguiremos que nuestra bolita de lint quede impregnada en toda su circunferencia. Las lanas preparadas hay que dejarlas en un papel, pues la vaselina es muy pegajosa. Advertencia, si eres de las personas que te aqueja alguna alergia al polvo o similares, la vas a tener muy jodida, te la vas a estar jugando a cada amasado, así que advertido estás amig@.


Acto seguido, cortaremos unos cuantos cuadros de papel aluminio para su eventual envase. Una vez empaquetados, hay que dejarlos lo más compactados posibles.





Voilá! aquí están sólo algunos terminados ya en su empaque final, la bolsa plástica de cierre de zipper le añadirá más protección al cartucho de Vaselint, sólo el tiempo me dirá qué tan frescos se conservarán estos, pero aún si perdiera frescura el petrolato, las lanas de por si, al ser filamentos muy finos y abundantes arderán ante la más mínima chispa, doy fe.


Échenle un ojo a la siguiente foto, la relación volumen (peso/tamaño) versus poder calorífico, hacen de los cartuchos de Vaselint un excelente activo en nuestros kits para encender cualquier fogata que si lo hacemos con sólo yesca. Por cierto, los "pelos" yesqueros que ven son fibras de palma recolectados a las afueras de mi fraccionamiento, jeje! Ojo! no estoy diciendo que sea mejor una cosa que la otra, simplemente la comparativa va encaminada a hacer notar ese as bajo la manga que comentaba muy al principio de nuestro reportaje.


Bien, para encender, simplemente desempacamos con cuidado nuestro cartucho, lo "desgreñamos" un poquito, exponiendo el centro, que seguramente va a estar seco y libre de vaselina.



Con un chispazo tendrá a la primera para comenzar a arder. El envoltorio de aluminio puede servirnos además como base para evitar humedad en la bola de Vaselint, de afectarle, claro.


Esta bolita de una pulgada de diámetro, duró encendida con buena llama hasta un  tiempo total y efectivo de ocho minutos, suficiente como para "hacer lumbre" en situaciones difíciles. Me atrevería decir que incluso es del tipo "anti-tempestad" pues el petrolato la hace arder con gran firmeza ante rachas de viento moderadamente fuertes.


Bien mis chamacones, pues hasta aquí llegamos con esta recomendación que como siempre, espero les sea de utilidad.  Disculpen ustedes tanta payasada al principìo, pero bueno, es año nuevo, calentamos motores  y se vale un poquito, jeje! Cuídense y seguimos en contacto.

Garrison 

P.D. La foto del ombligo no es mía, jeje! está tomada del siguiente sitio:
´pa que luego no digan que no se hacen cosas buenas con lo que sale de esa peluda oquedad, jajaja! later!

4 comentarios:

ramon dijo...

Y yo tirando a la basura las pelusas que salen debajo de la cama y demas con la mopa.

Yo al contrario lo que me toca aprender es un par de metodos para apagar fuego o como bajar la temperatur de algo sin dejarte la piel en el intento.

Unknown dijo...

Jajaja! Que gusto leerte hermanito! Lo mejor para este año chamacón, recibe un abrazototote.

MalAcero dijo...

Si es que las mentes retorcidas piensan igual querido Garrison, jejeje hace ya un par de meses que uso esa porqueria que suelta la secadora de ropa para encender la chimenea con el firestarter... lo de la vaselina es una añadido genial, yo usaba un chorreon de aceite pero es mucho mas estable... COMO DE COSTUMBRE BRAVO POR ESA MENTE DISFUNCIONAL Y CREATIVA.

Unknown dijo...

Muy agradecido Master!

Un abrazote!